Difamación del Evangelio

Difamación del Evangelio
2 Pedro 2:1-3

          Muchos hablan de los efectos de una primera impresión, ya sea de una persona, organización o artefacto. La realidad es que la primera impresión no es una causa lógica para establecer conclusiones en base a la esencia de algo o alguien. Muchas veces conocemos a alguien que nos agrada en un principio pero al final resulta un panorama totalmente distinto. Así mismo sucede con el hermoso Evangelio del Señor Jesucristo. 

         Algunos se fijan en una sola dimensión del Evangelio o simplemente reciben por parte de otra persona una descripción errónea del mismo. Quiero exponer una serie de ejemplos que ayuden a entender como la distorción de un buen entendimiento,resulta en una difamación que puede ser contagiosa:

Algunos suelen predicar como si el evangelio fuese una vara mágica hecha con el fin de satisfacer nuestras peticiones pero la realidad es que Dios concede nuestras peticiones si realmente nuestro corazón tiene en primer lugar las cosas de arriba. Estas personas cuando se dan cuenta que no han recibido en el tiempo que ellos desean lo que han pedido, se marchan dandole la espalda a Dios. Pero seamos honestos, si tu hijo de 5 años te pide un carro, ¿se lo darías? (Mateo 6:33)

Algunos etiquetan al Evangelio como un fraude simplemente porque algún supuesto embajador de Cristo solo se pone en pie detrás de un púlpito con el fin de lucrarse lo más que pueda. Volvamos a ser honestos, si alguien dice al público algo en nombre tuyo sin tu haberle dado permiso, ¿crees que es justo que las personas te condenen a ti? La gente siempre hablará pero si es cierto o no es tu responsabilidad consultarlo con Dios y su Palabra. (1 Juan 2:27; Juan 16:13)

         En fin, podemos seguir una lista sumamente numerosa de argumentos que provocan la difamación del Evangelio, que es una de las cosas más hermosas que un ser humano pueda tener. El Evangelio es como una lámpara dentro de un profundo oceano, lugar donde parece la oscuridad reinar. En medio de tantos argumentos, filosofías y posturas en cuanto a lo que es verdad y la posición del Ser Humano ante el Universo y todo lo que hay en él, Jesucristo dijo "Yo Soy el Camino, la Verdad y la Vida."